Uno de mis objetivos en este discurrir de la vida ha sido siempre comprender la realidad que me rodea. Estoy deprimido. Cada día que pasa entiendo menos la sociedad con la que convivo. No entiendo a los ciudadanos que siguen votando mayoritariamente a Berlusconi y a Camps. Ambos manifiestan, sin pudor, su absoluto apego al poder y la convicción de que las urnas los exculparán de cualquier imputación de tipo penal, los dos, de igual manera, confunden así la política con la justicia. Tal vez pueda entender el voto de la joven Ruby y también el del Bigotes. No entiendo en estas revoluciones del mundo árabe de qué lado están algunos, si del lado de los manifestantes o del lado de aquellos que generan beneficios millonarios para las grandes multinacionales de Occidente.
He leído en la prensa que las empresas del Ibex 35 aumentaron sus beneficios en un 22%, es decir, cerca de 50.000 millones en 2010. En la misma página el periódico informaba de nuestra tasa de paro, un 20,4 % y un 43,1 % entre los jóvenes. Pues no, no lo entiendo. (...)
He leído en la prensa que las empresas del Ibex 35 aumentaron sus beneficios en un 22%, es decir, cerca de 50.000 millones en 2010. En la misma página el periódico informaba de nuestra tasa de paro, un 20,4 % y un 43,1 % entre los jóvenes. Pues no, no lo entiendo. (...)
Sigue leyendo el artículode Roberto Cantos publicado en Levante-emv en este enlace
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